1. En una olla pequeña, añade 20g de harina de fuerza y 90mL de agua.
2. Calienta 130g de leche de la nevera durante 20 segundos en el microondas (la leche debe estar tibia, no muy caliente, ya que puede matar la levadura después).
3. Mezcla la leche tibia con 7g de levadura seca de panadería y 20g de azúcar. Deja que repose 10 minutos mientras avanzas con los siguientes pasos de la receta.
4. Calienta 35g de mantequilla en el microondas durante 20 segundos. Debe quedar blandita y semi-líquida.
5. Añade todos los ingredientes al bol de la amasadora: la mezcla de leche, levadura y azúcar, el tangzhong, 330g de harina de fuerza, 1 huevo de la nevera, los 35g de mantequilla y 7g de sal.
6. Empieza amasando a potencia baja (nivel 2 en mi amasadora Kitchen Aid) durante 2-3 minutos con el gancho amasador para mezclar los ingredientes, hasta que se forme una bola.
7. Cuando la bola esté formada, sube al nivel 4 (potencia media) y amasa durante 10-12 minutos para que se forme el gluten en la masa.
8.Tras este tiempo, saca la masa del bol, junta los bordes hacia el centro, dale la vuelta y empuja la masa hacia a ti. Repite este proceso varias veces hasta formar una bola lisa.Cocina a fuego bajo y mezcla hasta conseguir una pasta densa, con la consistencia de un yogur griego. Cuando esté lista, deja que se enfríe.
9. Pon la masa en un bol grande y tápala con film. Déjala fermentar hasta que doble su tamaño. Te comparto consejos y tiempos de fermentación de referencia, pero guíate mejor por el tamaño de la masa.
10. En invierno, si hace frío, te recomiendo ponerla dentro del horno con un vaso de agua caliente para crear un ambiente más cálido (45 minutos aprox.).En verano, si hace calor, puedes fermentar la masa a temperatura ambiente (1 hora aprox.).
11. Cuando haya doblado su tamaño, aplasta la masa unas cuantas veces para desgasificarla.
12. Divídela en 6 trozos iguales. Puedes pesar la masa y dividir el peso entre 6, para saber cuánto tiene que pesar cada trozo.
13. Dale forma de pan de burger a cada trozo: Coge un trozo, arrástralo hacia ti, gíralo y vuelve a arrastrar hacia ti. Repite este proceso hasta que la masa quede redonda y lisa.
Haz lo mismo con el resto de panes.